LAS NAVIDADES, ¿BIEN O EN FAMILIA?.............. LA SAGA

Capítulo 2: NAVIDAD

   Domingo 25 de diciembre de 2011, Dia de Navidad, nos levantamos de dormir y..........¡Sorpresa! Había llegado Papa Noél y había dejado un regalo para cada uno de mis niños. En mi casa preferimos a los Reyes Magos y nos dejamos de chorradas como "...es que así disfrutan más de los juguetes" ¿es que hasta el día de Reyes los niños no pueden jugar con otra cosa?. En fin, como decíamos, aunque la mayoría de regalos se concentran para el día de Reyes, Papa Noel debe traer algún detalle/ito para mis niños sobretodo por el hecho de que otros niños si que tienen muchos regalos y el que ellos no tengan nada es como se hubieran portado mal. Pero Papa Noel solo deja algo para ellos. El regalo debe ser del tamaño que quepa en la bota que tenemos preparada para la ocasión, aunque de un valor económico mucho más pequeño (los niños no entienden de precios pero si de detalles).

  Esa mañana fuimos a felicitar a mi familia materna (abuela, tios, primas, etc) y aprovechamos para visitar el Belén del Tio Pascual, que recomiendo, si teneis ocasión, que visiteis, bien en persona o a través del blog elbelendepascual.blogspot.com.

Como ya había informado en un comentario de una entrada anterior, la comida de Navidad fué en casa mi abuela paterna y, como todos los años, el menú consistió en unos entrantes distribuidos por la mesa, pates, ibericos, gambas, langostinos, etc. De primer plato (yo lo considero el plato principal ya que éste me lleva directamente al postre, porque ya no puedo seguir con el plato que va después) comimos arroz caldoso del caldo del puchero. El arroz iba acompañado (a elección de cada uno) de "pilotes", blancas o negras. Las llamamos así porque se distinguen por el color ya que unas llevan sangre y las otras no. Después había pavo al horno (se vino a casa en un Tuperware), macedonia de frutas, tarta de crema y yema, etc. Lo que quiero destacar de esta comida tradicional es el momento en que mi abuela repartió "Les Estrenes". Marca la tradición que mi abuela se sienta en una silla (cuando vivia mi abuelo, estaban los dos sentados) y todos y cada uno de los allí presentes nos ponemos en fila por orden de edad, desde el más mayor al más pequeño, y uno a uno vamos pasando haciendo el siguiente ritual: Primero se le besa la mano derecha, después un beso a cada mejilla y se le desea Feliz Navidad, mi abuela, a cambio nos da un billete como "estrena". Lo más curioso es que pone la mano en el bolsillo sin mirar y no se equivoca al sacar el billete, porque, evidentemente, no es la misma cantidad la que da a los hijos que la que da a los nietos y biznietos. Y pobre del que no le besa la mano, porque se queda sin billete. Sino que se lo pregunten al primo pequeño que hubo unos cuantos años que no quería besar la mano y no os podeis ni imaginar lo que sufría para conseguir su deseado billete (ya habia hecho cuentas y ya sabía lo que quería comprarse con esa cantidad). Evidentemente ahora ya no duda en lo que tiene que hacer.

 

Arroz caldoso con "pilotes" blacas y negras.

  No me queda mucho mas que añadir de este día, solo que se terminó tal cual lo empezamos, con las visitas para felicitar la Navidad a familiares y allegados.

  Este capítulo se lo dedico a "Garbansito", que al año que viene será uno más (de momento), en esa larga mesa del dia de Navidad, y a mis abuelitas. Deseo y espero que  puedan "estrenarnos" durante muchos años más.

Os espero a todos en el próximo capítulo.